Una persona, de 61 años y vecina de Gandía (Valencia), ha sido detenida por la Guardia Civil de Albacete. El arrestado viaja por la A-43, la Autovía de los Viñedos, hasta que fue interceptado por un control de la Guardia Civil de Albacete en Villarrobledo. En el interior del vehículo los agentes encontraron 18 fardos cargados con más de media tonelada de hachís, exactamente 540 kilos, tal y como informa un comunicado de prensa de la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha.
Todo comenzó, como se comentaba, en un control dentro del operativo para dificultar y controlar la circulación de personas y vehículos que puedan contener droga. Los agentes observaron un coche que hacía una maniobra sospechosa para eludir el control.
La maniobra evasiva no impidió que la Guardia Civil le diese el alto al vehículo. Un helicóptero de seguimiento observó la fuga hasta que finalmente lograron parar el vehículo.
En el interior estaban los 18 fardos. Iban ocultos bajo una manta, pero el gran volumen de los mismos era algo que difícilmente pasaría desapercibido. Los fardos tenía un peso de unos 30 kilos cada uno y dentro había una sustancia de color marrón que, tras realizar un narcotest, resultó ser hachís.
De la droga que fue interceptada, según la Guardia Civil, podría haberse obtenido 1.080.000 dosis en el mercado ilícito.
El detenido, así como la droga y el vehículo incautado han sido puestos en conocimiento del Juzgado número 1 de Villarrobledo.