El alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, ha asegurado hoy que el Consulado de España en El Salvador le ha asegurado que el sacerdote español, Antonio Rodríguez-Tercero, conocido popularmente como el «Padre Toño», que está detenido en dependencias policiales», está siendo «tratado bien».
Sierra ha apuntado que en las últimas horas está en estrecho contacto con el cónsul de España en El Salvador para interesarse por la situación del pasionista daimieleño que en las últimas hora ha vuelto a ser detenido tras formular el fiscal nuevas acusaciones contra él, después de que en un primer momento quedará en libertad tras se acusado de colaborar con las maras salvadoreñas.
El alcalde de Daimiel ha comentado que todo el mundo sigue insistiendo en pedir la libertad del religioso español, después de que en un primer momento se decretaron «medidas preventivas a la prisión».
«La sorpresa», ha señalado el edil, «fue cuando el fiscal presentó una nueva acusación» y pocas horas después volvía ser detenido acusado de «supuestos vínculos con el cabecilla de la mara 18, Carlos Ernesto Mojica Lechuga, alias Viejo Lin».
Leopoldo Sierra ha apuntado que el portal «elsalvador.com» informa que este segundo caso partió de la investigación de una extorsión en la que estarían involucrados un grupo de pandilleros de la mara 18.
A partir de ahí, y a raíz de investigar conversaciones telefónicas del cabecilla de esta mara, la fiscalía salvadoreña, supuestamente, descubrió que el padre Antonio Rodríguez se comunicaba con el Viejo Lin, quien le pedía, siempre según la versión del fiscal, que «gestionara el traslado de reclusos de alto riesgo del penal de Zacatecoluca, hacia otros penales de menor seguridad».
También se estableció, a través de la intervención telefónica, que el sacerdote ingresaba objetos prohibidos a los penales, todo ello, según la fiscalía.
EL SACERDOTE ESPERA QUE EL JUEZ LO EXONERE DE FORMA DEFINITIVA
El sacerdote daimieleño, ha dicho el alcalde, sostiene que la nueva acusación que le han abierto tiene que ver con los mismos hechos y delitos del primer caso, por lo que espera que el juez lo exonere de forma definitiva, por no existir las pruebas en su contra.
Un deseo que ha dicho Sierra compartir, por lo que confiaba en que el juez valore «la lucha, el esfuerzo, el trabajo por los demás que de forma desinteresada» realiza en El Salvador el Padre Toño.
Finalmente, el alcalde ha mostrado su convencimiento de que los gobiernos de España y de Castilla-La Mancha mostrarán su apoyo a la labor del sacerdote daimieleño en defensa de los ciudadanos más pobres del país centroamericano.