El hombre que se habría precipitado al vacío tras golpear a su mujer en la localidad toledana de Torrijos estaba en tratamiento psiquiátrico y estaba obsesionado con que le iban a quitar a su hija, que también está muerta, tras conocer las informaciones del caso de los «bebés robados» en distintos hospitales españoles. Una compatriota de la malograda familia, Bahija, que ha hecho de intérprete del matrimonio durante el mes y medio que llevaba residiendo la pareja en Torrijos, ha explicado a los periodistas que el fallecido, E.A.E., de 42 años, «no estaba bien de la cabeza» y que era una «buenísima persona».
Según su relato, ella acompañó al fallecido dos veces a la consulta psiquiátrica del Hospital Provincial de Toledo y que allí le dieron un tratamiento y «le soltaron».
También le acompañó en otra ocasión al médico de cabecera de Torrijos y que este le «vio bien» y que le prescribió «un tratamiento normalito» y «mira, ahora, que tragedia ha pasado».
La intérprete ha explicado que el hombre, que fue detenido el pasado 15 de mayo por intentar llevarse a una niña del pueblo que estaba con su abuelo en un parque de la localidad, estaba obsesionado con las informaciones periodísticas sobre el caso de los «bebés robados» en distintos hospitales de nuestro país hasta los años 80.
Bahija ha explicado que el pasado mes de mayo el matrimonio regresaba a España desde su país de origen, Marruecos, y que la mujer tuvo un parto prematuro que les sorprendió en Cádiz, por lo que el bebé, una niña que ahora tenía dos meses y medio, quedó ingresado en un centro hospitalario de Cádiz, donde también se quedó la mujer, mientras que él regresó a Torrijos.
Al parecer, según la intérprete, el hombre no aceptó que la mujer y la hija se quedaran en Cádiz, una situación que le «trastornó» y él estaba obsesionado con que le había quitado a su hija a raíz de las «informaciones de las monjas que están robando a las niñas», ha dicho Bahija en referencia al caso de los bebés robados.
«Con este problema se trastornó el hombre y él pensaba que le habían quitado a su hija», ha dicho la intérprete, quien ha precisado que el fallecido era una «persona buenísima, muy educado».