sábado, 28 de septiembre de 2024
20 años por cada uno de los dos asesinatos 20/03/2015junio 8th, 2017

El jurado popular ha considerado culpable de asesinato con el agravante de alevosía y parentesco a Florentino M.M. por la muerte de su hermano y de su cuñada tras embestir su furgoneta con su vehículo en la carretera que une Campo de Criptana con Pedro Muñoz en 2013.
Así lo ha dado a conocer la portavoz del jurado en la vista pública que se ha celebrado esta tarde en la Audiencia Provincial de Ciudad Real.

El jurado popular considera probado que el acusado mató a su hermano A.M.M, de 49 años, y a su cuñada, P.G.M.Q, de 47, buscando el momento más idóneo y el lugar, de forma que esperó a que las víctimas se encontraran en la recta de la carretera para alcanzar la mayor velocidad posible y provocar el máximo daño.


El jurado ha tenido en cuenta en su veredicto que el acusado conocía las distintas características de ambos vehículos y también el hecho de que simulara quedar inconsciente tras el accidente.

A tener del veredicto del juzgado, la Fiscalía ha pedido para el acusado la pena máxima prevista para estos casos, un total de 40 años, 20 por cada uno de los dos asesinatos.

Esta misma pena la ha pedido la acusación particular, que también ha pedido para los hijos de las víctimas una indemnización de 400.000 euros para cada uno de ellos.

Por su parte, la defensa ha mostrado su disconformidad con el veredicto del jurado y ha pedido la pena mínima para su defendido y la responsabilidad civil que marque la compañía de aseguradora del vehículo.

Asimismo, el abogado de la compañía de seguros ha defendido que no debería ser responsable de las indemnizaciones más allá de la responsabilidad subsidiaria y ha planteado que la compañía asuma una indemnización de algo más de 66.000 euros para los hijos mayores del matrimonio fallecido y 167.000 euros para el menor.

El abogado de la acusación particular, Javier Fernández Agenjo, ha dicho a los periodistas al concluir el juicio que tenía un sentimiento «agridulce» porque en lo profesional se sentía satisfecho por el veredicto del jurado pero en lo particular «nadie» iba a devolver a los fallecidos e iba a quitar el dolor y el sufrimiento a sus hijos.

Ha dicho que las pruebas «eran contundentes desde la primera hasta la última» y ha admitido sentirse satisfecho porque en la «línea delgada» que hay entre el homicidio y el asesinato, el jurado se había decantado por el asesinato, algo que la acusación había defendido al considerar que Florentino «no aprovechó una ocasión para matar, sino que preparó la ocasión para matar y asegurar el resultado y evitar que se defendieran» su hermano y su cuñada.

Los hechos tuvieron lugar el 2 de mayo de 2013 cuando el acusado mató con su coche a su hermano y a su cuñada. Los dos hermanos estaban enemistado por la gestión de la empresa familiar denominada ‘Grupo Criptana». EFE

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