El cuerpo del hombre de 76 años que en julio del año pasado mató a su hijo de 37 en Campillo de Altobuey (Cuenca) ha sido encontrado sin vida en un paraje de la localidad.
Según ha explicado a EFE el alcalde de Campillo, Francisco López, el hombre estaba en libertad desde hace algunos meses tras pasar por la cárcel.
La tragedia no ha sido una sorpresa para los vecinos de la localidad, ya que -según López- a cualquier familiar y vecino con el que tenía confianza le decía que «yo aquí no hago nada».
El hombre se entregó a la Guardia Civil el pasado mes de julio tras disparar sobre su hijo con una escopeta de caza de calibre 12, causándole la muerte.
El hijo maltrataba de forma habitual a sus padres y sus dos hermanos, que incluso llegaron a interponer una denuncia, aunque la retiraron después de que amenazase con matarlos a todos, según explicó en su momento el alcalde de la localidad.
El hombre será enterrado a las 12:00 horas en Campillo de Altobuey, después de que se le haya practicado la autopsia.