El incendio en el vertedero de neumáticos de Seseña (Toledo) que se declaró el pasado 13 de mayo ha quedado extinguido esta mañana, 20 días después, en la parte de Castilla-La Mancha aunque resta extinguir la zona de la Comunidad de Madrid, en el término de Valdemoro, que no obstante, acumula menos neumáticos.
Así lo han explicado, en rueda de prensa, los consejeros de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, y de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha, Francisco Martínez Arroyo.
Ruiz Molina ha agradecido a los equipos de extinción los trabajo teniendo en cuenta que en fuegos similares, en Estados Unidos, se ha tardado hasta nueve meses en la extinción, y les ha felicitado por su técnica de acelerar la combustión y, con ello, la extinción.
La Comunidad de Madrid debe terminar ahora de extinguir el incendio en la zona de Valdemoro, donde no se ha podido intervenir antes porque los trabajos de los técnicos de ambas regiones no eran compatibles y porque hasta el pasado 27 de mayo no se pudo acceder al área de Valdemoro, que estaba acordonada por la Guardia Civil para investigar las causas del incendio.
Además, los equipos de la Comunidad de Madrid han estado trabajando en la reparación de la línea de alta tensión mientras Castilla-La Mancha aceleraba la combustión.
La coordinación entre las dos comunidades autónomas y las conversaciones entre los dos presidentes, Emiliano García-Page y Cristina Cifuentes, se mantiene y, de hecho, aunque Castilla-La Mancha podría ahora rebajar el nivel uno a fase de alerta y retirar sus dispositivos, va a mantener el nivel y los medios hasta que quede totalmente extinguido el incendio.
Ruiz Molina ha precisado, en este sentido, que los técnicos de Madrid calculan que se extinguirá en los próximos días porque, en principio, hay menos neumáticos y las tareas se prevén más fáciles.
En Seseña ya están trabajando los dos mayores gestores autorizados en Castilla-La Mancha de recuperación de neumáticos para proceder «de manera inmediata» a trasladar los neumáticos a sus instalaciones y allí reciclarlos.
Además, la empresa pública Emgrisa está haciendo un análisis de la situación en la parcela en la que se acumulan los neumáticos y en 10 o 15 días decidirá qué actuaciones acomete con los residuos y para su restauración ambiental.
Martínez Arroyo ha concretado que los neumáticos retirados serán transformados en combustibles que la Junta comprará para calefacción de edificios públicos, una compra que estará financiada con fondos europeos en un 80 por 100 al tratarse de un proyecto de compra pública innovadora, según el estudio de Emgrisa.
Aunque en principio se estimó que había 30.000 toneladas de neumáticos sin arder, el consejero de Agricultura ha dicho que los técnicos hablan de una cifra menor, probablemente 15.000 toneladas.
Respecto a la retirada de neumáticos de la parcela, ha señalado que será «rápida» aunque antes hay que acondicionar los caminos para la entrada de los camiones, y sobre el número de medios que intervendrán ha recalcado que no van a «escatimar esfuerzos».
En el aspecto sanitario, en estos 20 días no ha habido ningún ingreso hospitalario y las personas que han sido atendidas en centros sanitarios tenían síntomas «muy leves», a veces confundidos con alergias primaverales, y han sido dados de alta ‘in situ’ en su mayoría,
Respecto a la calidad del aire, el consejero de Hacienda ha dicho que los niveles son inferiores a los límites legales establecidos, lo que no impida que haya habido «puntas» de una mayor acumulación de partículas en determinados momentos.
El Gobierno regional ha estado en colaboración desde el comienzo del incendio con el Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y el Instituto de Salud Carlos III, y ha creado una Comisión de Expertos en Calidad del Aire al frente de la cual está el catedrático de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Ernesto Martínez Ataz.
La semana pasada se tomaron medidas de acumulación de partículas en el interior y el exterior de dos colegios, el de la urbanización El Quiñón (la más próxima al incendio) y el Miguel Delibes del municipio El Viso de San Juan, a unos treinta kilómetros de Seseña.
En el interior de los dos centros escolares los datos son similares, según el CSIC, y en el exterior sí hay más acumulación de partículas en El Quiñón por lo que el CSIC aconsejó limpiar el exterior con agua a presión.
Juan Alfonso Ruiz Molina ha señalado, a preguntas de los periodistas, que «en las circunstancias actuales» los escolares del colegio del Quiñón podrán salir al patio sin problema cuando este centro reanude las clases el lunes de la próxima semana, 6 de junio.