La Guardia Civil de Ciudad Real ha procedido a investigar a un vecino de Miguelturra (Ciudad Real), de 57 años de edad, por un presunto delito de maltrato animal. El sujeto en cuestión, abandonó a 31 perros de rehala en el interior del vehículo en que los transportaba, tras lo que murieron 23.
El investigado posee varios antecedentes por delitos similares, según explica la Guardia Civil en una nota de prensa, y las diligencias instruidas se han entregado a los Juzgados de Ciudad Real.
Los hechos fueron descubiertos tras un aviso a las autoridades sobre lo sucedido. Así, varios agentes del Seprona llegaron al lugar en que guardaba a los canes, donde realizaron una inspección y descubrieron los perros que habían muerto. Solo ocho quedaron vivos, que fueron atendidos por un veterinario de forma urgente.
Todos los canes fueron intervenidos por la Guardia Civil, además de otros 11 más que se encontraban en la parcela. Todos los animales han sido puestos a disposición de la Autoridad competente en dos lugares adaptados y autorizados para ello.