La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete juzgará este lunes, 20 de enero, a un hombre acusado de un presunto delito de intento de asesinato por el que se enfrenta a una petición de pena del Ministerio Fiscal de 10 años de cárcel y 9.032,45 euros de indemnización por lesiones y secuelas de la víctima.
Según el escrito de acusación de la Fiscalía, los hechos ocurrieron sobre las 11:25 horas del 4 marzo de 2014, en Villarrobledo (Albacete).
El acusado vio que tenía aparcado junto a su domicilio un coche con el distintivo de «El cobrador del frac» y que había un trabajador de una empresa de cobros disfrazado con un frac para hacer pública y notoria su presencia en el vecindario.
Se dirigió entonces a una nave industrial de su propiedad, cogió un toro elevador y circuló con él hasta su casa, donde estaba aparcado el coche en cuestión.
Según el escrito, el procesado, con ánimo de causar la muerte del trabajador, embistió con el vehículo industrial -que llevaba los brazos delanteros extendidos y elevados al menos 30 centímetros sobre el suelo-, brutalmente y por sorpresa, al vehículo de esta empresa de cobros.
Introdujo las palas del vehículo industrial en las puertas del lado derecho a la altura de los ocupantes en el vehículo aparcado, aplastando asientos, carrocería y demás elementos y desplazándolo hacia la pared.
La víctima, que estaba de pie en la acera entre dicho vehículo y la pared de una vivienda, quedó atrapada entre los hierros de la carrocería del vehículo y la pared, causándole graves lesiones que afectaron a partes vitales del cuerpo y que podrían haberle ocasionado la muerte.
Como consecuencia de esta agresión sufrió lesiones en costillas, contusión pulmonar, isquemia aguda del bazo y polo inferior del riñón derecho, fractura de vértebras y pelvis; y fracturas diversas en huesos de piernas y pies.
Precisó de tratamiento médico y quirúrgico, tratamiento médico-ortopédico, tratamiento quirúrgico y tratamiento de rehabilitación, y tardó en curar 450 días, de los cuales fueron 28 días de hospitalización y 422 días impeditivos para su actividad habitual.
Le han quedado importantes secuelas que afectan a su movilidad y estéticas, así como incapacidad para tareas que requieran sedestación, bipedestación o deambulación prolongada o por terreno irregular.
El vehículo industrial estaba asegurado y la entidad aseguradora ha indemnizado a la víctima en la cuantía de 85.059,10 euros por las lesiones sufridas.