Los familiares de Ángel Osorio, el valdepeñero de 45 años cuyo cadáver fue hallado hace casi un mes en una finca en la carretera que une Valdepeñas y Daimiel, todavía no han recibido sus restos porque aún se desconoce el resultado de la prueba de ADN.
El cuerpo de Osorio, que se encuentra en uno de los tanatorios de Valdepeñas y al que los familiares no han podido ver, no será entregado por el juez hasta que no tenga los resultados de la prueba de ADN que determinen con exactitud la identificación del cadáver.
Según ha explicado a Efe la hermana del fallecido, aunque tienen la certeza de que es él porque llevaba el DNI en uno de los bolsillos del pantalón y por la coincidencia de sus prótesis dentales y de algunas cicatrices en el cuerpo, el juez no puede hacer nada hasta que no disponga de los resultados de las pruebas que despejen la mínima duda sobre su identidad.
«La espera está siendo muy larga, especialmente para mi madre, que quiere enterrarlo cuanto antes», ha subrayado la hermana, quien se consuela pensando en la posibilidad de que durante este tiempo aparezca alguna prueba que esclarezca el suceso.
El cadáver de Ángel Osorio, que desapareció el 26 de mayo, fue hallado el pasado 30 de octubre en una finca agrícola situada entre Valdepeñas y Daimiel, en avanzado estado de descomposición.
Desde entonces no ha trascendido ninguna información, ya que el juzgado de primera instancia e instrucción número 1 de Valdepeñas decretó el secreto del sumario.