Mari Carmen López, la madre del sacerdote español Antonio Rodríguez Tercero, ha lamentado hoy que su hijo, conocido en El Salvador como el «padre Toño», haya tenido que volver a dependencias policiales después de que en un primer momento fuera puesto en «libertad asistida».
Ha señalado que «un fallo judicial» ha llevado a su hijo de nuevo a ser retenido, al menos durante 72 horas en sede policial.
Según la madre, el religioso español volverá a tener que ser puesto a disposición judicial en este periodo de tiempo, después de que quedara puesto en libertad asistida con medidas alternativas a la de prisión.
El abogado del sacerdote español, Antonio Nelson, en declaraciones al diario digital elsalvador.com recogidas hoy por Efe, ha asegurado que el padre Toño «no ha sido absuelto», sino, que, «se le han dado medidas alternativas a la prisión».
Entre las medidas decretadas para el sacerdote, recogidas por el diario digital en su edición de hoy antes de que la familia confirmase que de nuevo iba a permanecer arrestado en sede judicial, estaba «que no puede salir del país, no puede ingerir bebidas alcohólicas y que no puede reunirse con pandillas, además de presentarse una vez al mes a los juzgados».
El propio padre Toño, en declaraciones a este medio reconocía que había quedado en «libertad asistida» y que iba a continuar el proceso, aunque, asegurad tener la conciencia libre.
La madre de Antonio Rodríguez ha asegurado que al volver a ser arrestado su hijo por el fallo judicial no ha podido hablar con él, lo que espera hacer en cuanto vuelva a salir a la calle.
La familia, mientras tanto, ha comentado, siguen con atención cualquier información que se pueda producir sobre su situación.
La Fiscalía General de la República (FGR), sigue manteniendo, según recoge el diario digital, que el vínculo del sacerdote con los pandilleros salvadoreños «no es precisamente para trabajar con ellos en procesos de reinserción, sino para ayudarles a seguir delinquiendo».
La FGR reveló ayer que basó sus acusaciones en 14 grabaciones que contienen conversaciones telefónicas entre el padre Toño y cabecillas de la mara 18.
Según el fiscal German Arriaza, dichas grabaciones constituyen las pruebas que los fiscales presentarán en el proceso contra el religioso.