Seis animales en total, entre ovejas y cabras, se encontraron los agentes hace ahora tres meses en el arroyo Tamujoso, dentro de la vía pecuaria, en la localidad toledana de Belvís de la Jara, tal y como ha podido conocer encastillalamancha.es. Los animales, metidos en sacos, como pueden ver en algunas de las imágenes que publicamos, fueron arrojados al agua sin ningún tipo de pudor por su propietario.
La Asociación Profesional de Agentes Medioambientales de Castilla-La Mancha (APAM CLM) inició de inmediato una investigación para conocer quién o quiénes fueron los autores del tal hecho, comenzando por el dueño de los animales.
Arrojar animales a cauces públicos puede ser un hecho constitutivo de un presunto delito contra la salud píublica y el medio ambiente, ya que está penado por la ley.
En las imágenes superior e inferior, dos de los sacos en los que metieron a las ovejas muertas y las tiraron al arroyo Tamujoso, en Belvís de la Jara (Toledo).