Eran cuatro médicos y dos farmacéuticos de Castilla-La Mancha que falsificaban recetas oficiales, aprovechando los datos de pacientes reales para extender los documentos, a fin de obtener anabolizantes, que ellos mismos consumían, y psicotrópicos, que exportaban a Cuba y Argentina.
Los médicos aprovecharon supuestamante desde 2012 que eran médicos de urgencias en varios centros del Sescam (Servicio de Salud de Castilla-La Mancha) para extender las recetas falsas. Los seis presuntos delincuentes fueron detenidos en Albacete.
Los supuestos delincuentes obtuvieron gran cantidad de anabolizantes y psicotrópicos.
Los dos farmacéuticos, titulares de varias oficinas de farmacia, daban salida a una gran cantidad de medicamentos con los datos de pacientes relacionados en sus archivos. Algunas de las identidades usadas tenían asignado un código que tiene una subvención del 100 por 100 por parte del Sistema Público de Salud.
Los arrestados tenían interés por fármacos muy variados, entre ellos grupos terapéuticos muy caros, algunos psicotrópicos, lo que elevaba el beneficio en gran medida. Pero lo que ocurría era que no había correspondencia entre los medicamentos prescritos y las patologías de los pacientes, que fueron identificados en relación con las recetas investigadas.
Después los medicamentos era enviados fuera de España por los médicos, sobre todo a Cuba y Argentina, sus países de origen. Sin embargo, destinaban los anabolizantes al autoconsumo.
La investigación corrió a cuenta de la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Albacete.