La Guardia Civil ha interceptado a un conductor que circulaba a 218 kilómetros por hora en la R-4 a la altura del municipio toledano de Seseña.
Además de la velocidad, en la parte posterior del vehículo viajaba un menor que no hacía uso correcto del sistema de retención infantil obligatorio, según informa la Guardia Civil.
Los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil detectaron la infracción a las 10.30 de la mañana de ayer, miércoles, mientras realizaban servicios de vigilancia en esa carretera en un helicóptero de la Dirección General de Tráfico.
El helicóptero estaba dotado con el sistema de detección de velocidad cinemómetro «Pegasus» y fue capaz de detectar la velocidad del vehículo, un Porche Panamera con matrícula francesa, a la altura del kilómetro 31, sentido Toledo.
Desde la Guardia Civil se solicitó apoyo a Agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil de Toledo para lograr interceptar al conductor del vehículo y notificarle las infracciones.