La Guardia Civil no ha abandonado «ninguna» línea de investigación en el caso de la desaparición de Roberto García Solana, de 64 años, vecino del municipio toledano de Casarrubios del Monte, que desapareció el 18 de febrero de 2019, según ha asegurado a Europa Press el delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Francho Tierraseca.
Cuando se cumple el primer aniversario de su desaparición, Tierraseca ha incidido en que la Guardia Civil ha puesto «todo su esfuerzo» en intentar aclarar el caso. «Desgraciadamente, no tenemos ahora mismo ningún dato concluyente sobre esta desaparición», ha afirmado.
Según ha dicho, cualquier desaparición «nunca se da por cerrada», sino que se sigue investigando y se siguen analizando algunas líneas de investigación, que «por cierto no se ha abandonado ninguna de ellas», todas están abiertas.
«La Guardia Civil va a seguir investigando pero no puedo dar ninguna conclusión sobre la investigación que se ha llevado a cabo hasta ahora», ha señalado.
Hay un detenido, en prisión provisional comunicada y sin fianza
Fue el pasado 23 de mayo, tres meses después de la desaparición del vecino de Casarrubios del Monte, cuando agentes de la Guardia Civil detuvieron a un varón por su relación con la desaparición de Roberto García Solana.
La titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 6 de Illescas decretó prisión provisional comunicada y sin fianza para el detenido, al que se le imputó de manera provisional como presunto autor de un delito de desaparición forzada y delito continuado de estafa.
Meses después, en agosto, era el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, quien se acordaba en Twitter de este vecino de Casarrubios del Monte y se mostraba esperanzado en su aparición.