Tres personas han sido imputadas por la Guardia Civil por daños arqueológicos en una alberca de época medieval mientras colocaban unas viñas en espaldera en una finca del término municipal de Guadamur (Toledo).
Según han informado a Efe fuentes próximas a la investigación, los imputados son los representantes de la empresa que gestiona los viñedos en la finca Daramezas y de las dos empresas que acometían las obras.
Las investigaciones del Seprona de la Guardia Civil se iniciaron en noviembre del pasado año y a finales de enero se imputó a los dos últimos supuestos responsables del delito contra el patrimonio histórico.
Según las fuentes, al colocar el viñedo se habrían producido daños en una alberca datada en la época medieval y que forma parte del yacimiento ‘Puente de Barcas’, que está muy próximo al río Tajo y al término municipal de Toledo.
Otras fuentes de la investigación consultadas por Efe han agregado que los imputados han comenzado a subsanar los daños causados en el yacimiento.