FeSP UGT ha informado de la condena al agresor de un profesional del Hospital de Guadalajara a un año de cárcel, por atentado contra la autoridad pública, y una multa de cuatro euros al día durante cuatro meses, por la tipificación de una falta leve, y 150 euros de indemnización, por las lesiones producidas.
El juicio se ha celebrado hoy, tal y como ha informado en rueda de prensa el sindicato, quien ya manifestó su más enérgica repulsa e indignación por los hechos acaecidos en mayo de 2015, cuando un profesional del centro sanitario «fue cobardemente agredido por un usuario durante el desempeño de sus funciones».
FeSP UGT ha valorado «satisfactoriamente» la sentencia dictada hoy que, al considerarse atentado a una autoridad pública, implica una sanción de tipo penal, además de la económica.
En opinión del sindicato, la administración debe tomar todas las medidas necesarias en defensa de los empleados públicos, no solo en el ámbito sanitario, sino en cualquier otro, para evitar este tipo de situaciones de agresión a profesionales en el centro de trabajo.
Y ha aludido a la nueva normativa que contempla el que «son reos de atentado los que agredieren o, con intimidación grave o violencia, opusieren resistencia grave a la autoridad, a sus agentes o funcionarios públicos, o los acometieren cuando se hallen en el ejercicio de las funciones de sus cargos o con ocasión de ellas».
Además, «se considerarán actos de atentado los cometidos contra los funcionarios docentes o sanitarios que se hallen en el ejercicio de las funciones propias de su cargo, o con ocasión de ellas».
Igualmente, determina que «los atentados serán castigados con las penas de prisión de uno a cuatro años y multa de tres a seis meses si el atentado fuera contra autoridad y de prisión de seis meses a tres años en los demás casos».