Un vecino de Carrión de Calatrava, en la provincia de Ciudad Real, está siendo investigado por la Guardia Civil como presunto autor de un delito de maltrato animal con resultado de muerte tras comprobar el estado en el que se encontraba un caballo que estaba en una finca, tumbado en el suelo, prácticamente muerto, esquelético, con evidentes síntomas de deshidratación y desnutrición. De hecho, los veterinarios, al comprobar su pésimo estado, decretaron su sacrificio.
El caballo llevaba mucho tiempo abandonado
La investigación comenzó hace dos semanas gracias a la colaboración ciudadana, cuando el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil de Ciudad Real recibió una información relativa al abandono de un animal.
En cuanto llegaron a la finca y vieron el estado del caballo, dieron aviso a los veterinarios. Y estos no pudieron hacer nada por salvarle la vida.
La Guardia Civil advierte que quienes maltratan a un animal se enfrentan a la pena de tres meses y un día a un año de prisión e inhabilitación especial de un año y un día y tres años para el ejercicio de su profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales y para la tenencia de animales.