La bola de fuego en la noche de Reyes que se desintegró a 35 kilómetros de Ciudad Real
No era la estrella de oriente que marcaba el camino de los Reyes Magos, pero podría parecerlo, porque una impresionante bola de fuego entró en contacto sobre la atmósfera 83 kilómetros por encima de la provincia de Ciudad Real y dejó su último rastro a 35